Uno de mis lugares favoritos es Puerto Viejo, desde pequeña tuve mucha cercanía con este mágico lugar y con los años la vida me volvió a reencontrar con este pueblito lleno de corales, vegetación y humedad.
Pensaba que no era una persona de playa, que odiaba la arena en la piel y aún más estar sudando horas sin un aire acondicionado. Lo que pasa es que cuando nos vemos inmersos en el síndrome de la ciudad y el cemento, perdemos toda capacidad de valorar ese sentimiento de respirar aire de mar.
A veces, o más bien siempre que sea posible, es necesario ponernos en primer lugar dejando de lado el estrés y las supuestas prioridades, para escaparnos y valorar la linda vida que tenemos.
Nada hacemos sentados en una silla tomando Coca Cola, regalando tiempo para que otros hagan dinero, tratando de llegar a la siguiente quincena inconformes además, con el tipo de vida que llevamos. ¡Eso no es vida!
Así que desde una casita de madera en el Caribe les comparto este post, lleno de inspiración y empoderamiento para detenernos, conocernos y ponernos en primer lugar. Meternos en la selva, ensuciarnos y agradecer el poder de tomar desiciones para encaminar nuestra vida hacia la felicidad.
El positivismo está en todos lados, principalmente dentro de nosotros, pero en caso de que se nos olvide es siempre necesario tener cosas alrededor que nos recuerden.
Como mi pañito de Marché con frases lindísimas que me recuerdan qué me hace feliz y porqué no debo dejar de hacerlo.
Y es que para sentirnos bien con la vida no es que tenemos que venirnos a vivir a la playa, ¡ojalá pudiéramos! Pero con estar en contacto con la naturaleza y con lo que nuestro interior dice y necesita, es más que suficiente.
Si no les gusta su trabajo, cambiénlo, si no les gusta su cuerpo, hagan ejercicio, si no les gusta su temperamento, prueben cosas como yoga, ¡todo en la vida se puede cambiar y mejorar!
Mi happy hour en la playa estuvo además acompañado de este lindo vestido de baño y salidita de Coral Bikinis , una marca que he seguido desde sus inicios y que me sorprende su constancia y crecimiento. Todos podemos hacer lo que nos apasiona, es solo amarrarnos los pantalones y emprender la vida soñada que siempre hemos querido tener.
Un beso enorme, La Kovach.
Paño: Marché
Vestido y salida de baño: Coral Bikinis
Cartera y sombrero: Mercado de Artesanos Antigua Guatemala
Lentes: H&M
Fotografías: Steven Cooper ( not_me_s75)